Cecropia obtusifolia

Arboles de 6 a 25 m de altura, de bosques muy húmedos, que se distribuyen de México a Ecuador, a elevaciones entre 50 y 1500 m (1).

Estos árboles, como otros del género cecropia, poseen potencial como plantas fitoremediadoras, por su capacidad para absorber los metales pesados de suelos contaminados (Durango et al.,2010) citado en (4). Se considera también que sus hojas tienen propiedades medicinales para aliviar la tos y las crisis asmáticas (Pardo, 2000) citado en (4). Además proveen alimento y hogar a una gran variedad de animales, incluidos murciélagos (Lobova et al., 003) citado en (4) y aves (Folgarait & Davidson, 1995) citado en (4).

También los científicos estudian la relación simbiótica entre guarumos y algunas especies de hormigas del género Asteca. Para recibir la protección de las hormigas, en esta relación, los guarumos ofrecen estructuras especializadas para facilitar su anidamiento. Y para contribuir a su alimentación, en la base de los peciolos de sus hojas poseen unas estructuras llamadas cuerpos de Müller (se observan en una foto), de los que brotan granos de glucógeno con un largo aproximado de 1-2mm (Rickson,1971) citado en (4). También se ha descrito la presencia de glándulas perladas en la lámina foliar (Janzen, 1973;Longino,1989a) citado en (4). Ambos parecen ser ricos en glucógeno, proteínas y lípidos, por lo que proporcionan una valiosa fuente de alimento a las hormigas (Wetterer,1997) citado en (4).

Es hospedera de las larvas de la mariposa Historis acheronta acheronta. En fotos se alimentan de sus amentos un Congo (Alouatta palliata), un colibrí (Thalurania colombica hembra), un saltator (Saltator coerulescens) y una viudita (Thraupis episcopus). Un semillero (Sporophila funerea) se alimenta de los cuerpos de Müller en un guarumo joven.